Técnica para colocar un BOZAL o cinta al perro

Técnica correcta para colocar un bozal o cinta alrededor del hocico de un perro (también puede usarse con gatos pero es mucho mas difícil)


Poner un bozal previene que el perro muerda y también desviará su atención del procedimiento que se está realizando.


PASOS:


De ser posible sentar al perro en el suelo: en esta posición es menos probable que el perro se quite, retroceda o muerda, si el perro es pequeño se puede posicionar sentado sobre la mesa, teniendo cuidado de que no muerda en el trayecto. 

El ayudante o dueño del perro lo debe tomar desde atrás por el cuello, por detrás de las orejas, dejando el hocico hacia adelante, si el perro mueve mucho la cabeza, se puede tomar suavemente de las orejas. Si el perro mueve la cabeza hacia los lados, el bozal no se puede atar rápidamente, corriendo riesgo de que muerda. Se debe tener mucho cuidado con las razas braquicéfalas (de hocico chato como el shitzu o pequinés) por el riesgo de presentar prolapso de los globos oculares y episodios de estrés agravados por el síndrome braquiocefálico. 


A modo de bozal, si no se tiene uno apropiado o que funcione bien, se pueden usar cordones de zapatos o tiras de tela que permitan mantener cerrado el hocico. No se recomienda el uso de tiras de plástico, como bajadas de suero, ya que éstas al ser plásticas, se estiran y el animal puede sacárselas. Tampoco se recomiendan cordones muy finos ya que pueden producir daño. La cuerda se debe sostener y hacer una curva con ella en el aire y atar con una sola vuelta los extremos, sin apretarla para poder ponerla en el hocico del perro. 

Acercarse al perro de forma tranquila, agachándose para estar a su nivel si es que está sentado en el suelo. Agacharse previene agresiones por miedo, pararse delante del perro puede hacer que este salte y tire a morder. 

Poner la cuerda con la vuelta alrededor del hocico del perro sobre la nariz, con el nudo hacia arriba, tomando la cuerda desde los extremos apretarla y atarla firmemente. Si hay demoras en atar el bozal, el perro puede librarse rápidamente de él, haciendo la tarea más difícil, ya que pondrá más resistencia. 


Luego de hacer un nudo sobre la nariz, pasar la cuerda por debajo y hacer otro nudo simple bajo la mandíbula. Luego llevar la cuerda hacia atrás y atarla con un moño detrás de las orejas. Es importante que sea un moño y no un nudo, porque de esta manera es fácil de sacar ante cualquier emergencia. Atar el bozal detrás de las orejas le impide al perro sacárselo con sus patas. 



Esta es una forma segura y rápida de hacer un bozal, incluso a veces más efectivo que los que disponemos, ya que muchas veces estos no se adaptan bien al hocico del animal y permite que abran la boca o se lo saquen con sus patas delanteras.

IMPORTANTE RECORDAR: Nunca dejar un perro con bozal sin supervisión, ya que existe riesgo de asfixia si vomita, si necesita jadear o por exceso de salivación.